¿Cómo ayuda la tecnología a mejorar la seguridad del paciente en Ciudad de México?
Con la implantación de la Historia Clínica Electrónica de ehCOS en la red hospitalaria de Ciudad de México se ha mejorado notablemente la seguridad del paciente.
SAMIH mejora la oportunidad y el registro de datos médicos, consiguiendo con ello un aumento de la seguridad del paciente.
Aumentar la seguridad del paciente es uno de los motivos por los que se ha impulsado el uso de las Tecnologías de la Información en salud. Precisamente esto ha motivado a la Secretaría de Salud de Ciudad de México a integrar los Registros Electrónicos de salud en toda su red hospitalaria con el Sistema de Atención Médica e Información Hospitalaria (SAMIH).
En diversos estudios realizados, basados en casos reales de atención, se ha demostrado que en muchas ocasiones la información clínica esencial de los pacientes no se encuentra disponible para los profesionales de la salud e, incluso en algunos casos, es el origen de errores médicos que podrían ser evitados disponiendo de unos datos médicos accesibles, confiables y precisos en la Historia Clínica. SAMIH mejora la oportunidad y el registro de datos médicos, consiguiendo con ello un aumento de la seguridad del paciente.
Con la implantación de la Historia Clínica Electrónica de ehCOS en la red hospitalaria de Ciudad de México se ha mejorado notablemente la seguridad del paciente en los siguientes aspectos:
- Reduce los riesgos asociados a la ilegibilidad caligráfica de los documentos. Con el Expediente Clínico Electrónico se almacena información de forma legible, útil y fácil de consultar para el personal de salud.
- Elimina la duplicidad de expedientes. Con el Índice Maestro de Pacientes se identifica la duplicidad, permitiendo asociar los expedientes a un único registro donde se encuentran todos los datos médicos u otra información relevante del paciente que puede ser utilizada por el personal de salud en la realización de diagnósticos o prescripciones más confiables.
- Seguridad de los datos del paciente. En comparación con los expedientes en papel, el electrónico tiene baja vulnerabilidad a eventos de pérdida o extravío de información. Con ello, se protege la posible pérdida de información confidencial de los pacientes, ya que el sistema cuenta con altos estándares de seguridad de la información. El acceso a los expedientes de los pacientes solo pueden realizarlo usuarios con autorización y clave, quedando su acción registrada en el sistema.
- Información estadística generada al instante. Gracias a la posibilidad de disponer de datos estadísticos en el mismo momento y que esa información no esté sujeta a largos periodos de espera, se consigue una monitorización efectiva y en tiempo real de posibles riesgos sanitarios, activando protocolos de prevención oportunos para evitar eventos adversos en los pacientes.
- Reducción de un 3% del número de cesáreas realizadas. Al disminuir este tipo de intervenciones, se reduce el riesgo de cualquier complicación para madres y recién nacidos, siendo más seguro para ambos. SAMIH incorpora como requerimiento una justificación médica para realizar la cesárea, lo que ha permitido reducir el número de intervenciones al no considerarse necesarias.
- Mayor seguridad en la prescripción. SAMIH funciona en base a criterios de nivel internacional con la integración de bases de datos estandarizadas de medicamentos y aumenta la seguridad en el proceso de prescripción creando alertas para interacciones medicamentosas, duplicidades, alergias y dosis máximas que dispensar a los pacientes, entre otras.
La interoperabilidad del sistema de salud ayuda a mejora de la seguridad del paciente
Disponer de toda la información clínica de los pacientes con tan solo un clic de ratón puede reportar numerosos beneficios tanto a médicos como, en mayor medida, a los pacientes. Esta disponibilidad de los datos de salud de los pacientes en cualquier punto de la red hospitalaria de Ciudad de México no sería posible sin la interoperabilidad de los sistemas, que permite transmitir información de los pacientes de manera más fiable e integrados en su Historia Clínica Electrónica, para que puedan ser consultados directamente por los profesionales de salud.
Al tener una gran cantidad de datos del paciente digitalizados, preparados para ser consultados en línea, se minimizan los errores derivados de la transmisión de información a través de otras fuentes -como el expediente en papel o incluso el propio paciente-, aumentando con ello la seguridad del mismo.
Gracias a la interoperabilidad en SAMIH, los médicos y enfermeras de la red hospitalaria tienen acceso de manera inmediata al historial clínico del paciente, que contiene más información y más fiable, permitiéndoles realizar diagnósticos basados en una mayor evidencia científica al contar con información integrada e integral, lo que repercute positivamente en su salud. Por otro lado, también es posible reducir el número de pruebas diagnósticas innecesarias, que además de ser molestas para los pacientes en muchos casos, pueden suponer ciertos riesgos para su salud.